Las organizaciones ecologistas que participaron en esta acción de limpieza aseguran que la implantación de un sistema de depósito y retorno de envases reduciría el abandono de estos residuos y aumentaría su reciclaje.
Una docena de voluntarios convocados por diversas organizaciones ecologistas realizaron el pasado martes un acción de limpieza y recogida de residuos de los márgenes y cauce del Río Segura en su desembocadura en Guardamar del Segura (Alicante). En una hora y media se recogieron casi 30 bolsas grandes de basura, alrededor de 300 kilos de residuos abandonados en la zona húmeda, incluida en el Catálogo de Zonas Húmedas de la Comunitat Valenciana.
Durante la limpieza se constató que la totalidad de los residuos recogidos eran envases: botellas de plástico, tetrabriks, latas, bolsas de plástico, fitosanitarios, botellas de vidrio, sprays de cosméticos, etc.
Se trata, en opinión de las organizaciones participantes, de «un ejemplo más del grave problema de abandono de residuos en el País Valenciano, y en general, en todo el Estado Español». Es sobradamente conocido la cantidad de residuos (principalmente envases de bebidas y bolsas de plástico) que se encuentran abandonados tras eventos festivos y deportivos en entornos naturales, playas, ríos y en el día a día. Los impactos que generan estos residuos son aún más graves en medios húmedos, ya que muchos materiales llegan al mar, provocando serias afecciones a la fauna y la flora marina.
Según denuncia en un comunicado Amigos de la Tierra, “el abandono de residuos en los espacios naturales es consecuencia de una doble combinación de causas: la irresponsabilidad de la ciudadanía y la irresponsabilidad de un sistema de gestión de envases que elude la responsabilidad de los productores, quienes ponen en el mercado esos productos”. Mientras, “esta tarea recae fundamentalmente en los Ayuntamientos, con costosos trabajos de limpieza”. Para el grupo ecologista, este sistema “se muestra particularmente ineficiente en la conservación y limpieza de los espacios naturales protegidos”.
Por todo ello, las organizaciones firmantes defienden la implantación de un sistema de depósito, devolución y retorno de envases. Mantienen que la venta de envases con un depósito económico retornable, “como se hacía antes con las botellas de vidrio”, ayudaría a reducir ese abandono de residuos de envases. “Con este modelo, los envases tendrían un valor añadido que disuadiría a la ciudadanía de abandonarlos”, además de reducirse “notablemente” las partidas de los Ayuntamientos dedicadas a limpieza viaria.
Así, las organizaciones ecologistas Amigos de los Humedales del Sur de Alicante, Amigos de la Tierra y Ecologistas en Acció País Valenciá, hicieron un llamamiento a las Administraciones para que “obliguen a los productores a poner en marcha sistemas de retorno de envases, con el fin de aumentar las tasas de reciclaje de los residuos de envases y reducir el abandono de esos residuos en el medio natural”.
Artículos relacionados
Las pymes catalanas, a favor de un sistema de depósito y retorno de envases
El sistema de depósito y devolución de envases se abre paso en Bélgica
Lidl prueba un sistema de pago por devolución de envases sin depósito previo
Coca-Cola está dispuesta a probar un sistema de depósito para envases en Gran Bretaña
El impuesto balear de turismo sostenible impulsa la creación de un centro de envases retornables en Mallorca
Navarra ensaya un sistema de envases retornables
Como es habitual, de manera absolutamente sesgada e interesada se propone el SDDR como solución para acabar con el abandono de residuos en el ambiente, ignorando que la mayor parte de los residuos abandonados no son envases usados, y cuando lo son, no son envases de productos que entrarían en el SDDR. Eso no impide que sistemáticamente se identifique el abandono de residuos con los envases que recogería ese sistema.
Afortunadamente una imagen vale más que mil palabras y, como siempre, el texto del comunicado no refleja la realidad, como viene siendo habitual en este tipo de informaciones.
Prácticamente ninguno de los envases que se pueden ver en la fotografía corresponden a los envases que irían a un sistema SDDR. En la mayor parte porque corresponden a productos de limpieza, que no están contemplados en el SDDR. En los caso de envases de bebidas, la mayor parte corresponden a garrafas de agua, que tampoco entrarían en un SDDR. ¿ Hasta cuando tendremos que seguir viendo esta basura ? Y no me refiero a la recogida.
Hombre, Ecothinktank siempre raudo y veloz a despotricar contra el SDDR, como buen paniaguado de Ecoembes.