Una máquina instalada en el entorno festivo premiaba con diez céntimos de euro por envase a quienes se acercaron a depositar en ella sus residuos.
La máquina de recogida selectiva de residuos colocada el pasado lunes en Pamplona, en el entorno de los fuegos artificiales con motivo de los Sanfermines, recuperó más de 2.000 envases durante las dos horas en las que estuvo operativa. Más de 500 personas se acercaron a ella para depositar sus envases durante ese periodo. Además, el martes por la mañana, en un ambiente más tranquilo, las familias que paseaban por la Calle Tafalla también pudieron participar de la experiencia. En total, más de 600 personas han recuperado más de 2.600 envases de refrescos, aguas, zumo y cerveza.
Esta experiencia piloto de recogida ha pretendido concienciar a la ciudadanía sobre el medio ambiente, el reciclaje y la limpieza, también durante las fiestas de San Fermín. Además, se premiaba económicamente el depósito de los residuos.
El Ayuntamiento de Pamplona ha participado en esta iniciativa, dentro de la campaña «Navarra, por los retornables», puesta en marcha por asociaciones como Greenpeace, Traperos de Emaús, la Compañía de las 3 erres, Acción Clima y Ekologistak Martxan, con la colaboración también de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona. Más allá de los datos concretos de recogida, esta experiencia piloto buscaba que la ciudadanía tuviera constancia del valor del residuo y de las posibilidades y el funcionamiento de los Sistemas de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR).
La rueda de prensa de valoración de la iniciativa se celebró ayer en el interior de la antigua estación de autobuses, donde la artista local Alicia Oteiza desarrolló una actuación artística en forma de cascada elaborada con las latas y botellas recuperadas estos días.
Diez céntimos por envase
La máquina estuvo el lunes a la hora de los fuegos artificiales en la Vuelta del Castillo, y el martes, durante la mañana, en la calle Tafalla. Cada persona podía depositar en ella hasta un máximo de diez unidades en un solo viaje y recibía diez céntimos de euro por cada envase depositado (en total como máximo un euro en cada viaje). Además, había personas voluntarias que recibían los envases que la gente quería depositar, como apoyo al trabajo de la máquina, y recompensaban a las personas que allí los llevaban.
El Ayuntamiento de Pamplona colabora con esta iniciativa y la promociona, aunque las compensaciones económicas corren a cargo de los colectivos impulsores de esta recogida selectiva. El objetivo es apoyar una acción que impulsa el reciclaje y conciencia sobre su importancia, implicando a la ciudadanía, y muestra una línea de continuidad con la apuesta municipal por el vaso reutilizable en las fiestas de San Fermín y en otros eventos.
Esta iniciativa se ha puesto en marcha en consonancia con la recientemente aprobada Ley Foral de Residuos de Navarra que propone actuar sobre los eventos festivos para reducir la cantidad de residuos que se producen y contempla, entre otras medidas, la posibilidad de instaurar un Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR), que consiste en poner una pequeña fianza a determinados envases. Esa fianza se devuelve al entregar el envase en los puntos o establecimientos habilitados.
“La experiencia ha sido todo un éxito ya que todo el mundo ha acogido la iniciativa con entusiasmo, ha participado de manera activa y las zonas donde se han recuperado los envases han quedado ostensiblemente más limpias que el resto de la ciudad”, comentó Ana Malón, de Greenpeace.
“Desde personas mayores hasta niños y niñas, todo el mundo ha participado y la pregunta más formulada ha sido cuándo se iba a poner en funcionamiento el Sistema de Depósito y Retorno de envases de manera definitiva”, añadió Andoni Uriarte, de Recircula.