Reino Unido estrena un sistema de semáforo para informar de la reciclabilidad de los envases domésticos

Los grandes productores deberán evaluar la reciclabilidad de sus envases y comunicarlos al regulador ambiental.

Desde el pasado 1 de enero, los productores que suministran envases domésticos en el Reino Unido deben evaluar la reciclabilidad de dichos envases e informar de los resultados de la evaluación al regulador medioambiental. Para ello, deberán utilizar la metodología de evaluación de reciclabilidad (RAM).

Los distintos tipos de envases reciben distintas clasificaciones: rojo, ámbar o verde. Esta clasificación afecta la tarifa de eliminación que se cobrará por ese envase. Es lo que se se denomina «modulación de tarifas».

De momento, solo los grandes productores deberán comunicar sus datos de evaluación de reciclabilidad. En concreto, se necesita recopilar y comunicar datos de evaluación de reciclabilidad si es responsable de envases domésticos .

Existen ocho categorías de materiales o «materiales específicos»:

• papel y cartón
• materiales compuestos a base de fibra
• Plástico (existen directrices separadas para plásticos rígidos y plásticos flexibles).
• acero
• aluminio
• vidrio
• madera
• otros

Cada artículo de embalaje o componente deberá evaluarse bajo una de estas categorías. Si un producto está compuesto de más de uno de estos materiales, se evaluará bajo la categoría que constituye la mayor parte de su peso.

En el caso de los envases de vidrio, las partes que se desprenden fácilmente deben evaluarse por separado del cuerpo de vidrio. Esto incluye elementos como tapas metálicas y tapas de rosca. Por lo general, no incluye etiquetas que no se pueden quitar sin esfuerzo o herramientas. Estas deben evaluarse como parte del contenedor.

En el caso de los envases de acero, aluminio y PET, se incluirá el resto de las piezas en el peso total, indicando el envase de bebidas como el material que constituye la mayor parte del peso.

Escala roja, ámbar y verde

Además de la categoría del material, el embalaje se clasificará en una de estas tres subcategorías:

• Los envases rojos tienen especificaciones que dificultan su reciclaje a gran escala.
• Los envases ámbar pueden experimentar desafíos durante la recolección y la clasificación, requieren una infraestructura especializada para el reprocesamiento, la eficiencia y la calidad de salida del reprocesamiento se ven afectadas o hay alguna pérdida de material secundario.
• Los envases verdes son ampliamente reciclables en la infraestructura actual del Reino Unido.

Algunos envases, además, quedarán exentos, como los envases reutilizados, a menos que hayan sido importados al Reino Unido, y cualquier embalaje exportado desde el Reino Unido por el productor

Por otro lado, los envases y sus componentes deben clasificarse como rojos si contienen cualquiera de los siguientes elementos por encima del límite de detección:

• Componentes eléctricos integrados o baterías que se clasificarían como equipos eléctricos y electrónicos; por ejemplo, cajas que incluyen luces LED.
• Cualquiera de las sustancias extremadamente preocupantes (SVHC) según REACH del Reino Unido.
• Tintas fabricadas de conformidad con la Política de exclusión de EuPIA para tintas de impresión y productos relacionados.
• Sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS) que se han añadido intencionalmente.