El proyecto REMEDISOST trabaja en una metodología que permitirá analizar los impactos ambientales, sociales y económicos de los procesos de remediación de suelos contaminados.
A la hora de acometer la recuperación ambiental de un suelo contaminado para nuevos usos, la selección de tecnologías de remediación que se realice es un aspecto clave, ya que además de la viabilidad técnica y de los costes que supone, es importante evaluar los impactos ambientales y sociales que puedan generar las acciones realizadas. Asimismo, uno de los requerimientos de la Ley 4/2015, de 25 de junio, de prevención y corrección de la contaminación del suelo, señala la obligación de elaborar estudios de alternativas de recuperación que integren tanto aspectos técnicos como ambientales, económicos o cualquier otro que pueda resultar de interés para la reutilización del suelo contaminado.
Atendiendo a esta demanda y ante la ausencia de metodologías de este tipo en el País Vasco, surge el proyecto de ecoinnovación REMEDISOST, en el que se desarrollará una metodología que permitirá analizar la sostenibilidad de un plan de remediación de suelos contaminados evaluando los posibles impactos ambientales, sociales y económicos que se produzcan durante la ejecución del mismo y teniendo en cuenta el ciclo de vida de las operaciones realizadas.
Este proyecto, que finalizará en marzo de 2017, pretende desarrollar una metodología rigurosa, fiable y robusta que consiga realizar un análisis y evaluación de la sostenibilidad de los distintos planes de remediación de suelos contaminados para que, desde el punto de vista técnico, se pueda recuperar un suelo desde una situación inicial de contaminación hasta una situación final acorde con el uso que se pretende dar al mismo.
Cofinanciado por la sociedad pública Ihobe y por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional, REMEDISOST está liderado y coordinado por el Centro Tecnológico Gaiker-IK4, Centro que aporta a esta investigación su amplia experiencia y conocimiento en la gestión y tratamiento de suelos contaminados y en el desarrollo de metodologías “ad hoc” para la evaluación de la sostenibilidad de productos y servicios. Igualmente, el proyecto cuenta con la participación de Neiker-Tecnalia, BC3 Basque Centre for Climate Change y la empresa AFESA.