El proyecto Mush-wood, liderado por Solteco, busca desarrollar una solución para el reciclaje y valorización de residuos plásticos agrícolas generados por el sector del champiñón.
La empresa riojana Solteco está desarrollando un proyecto europeo para la recuperación de residuos generados por el sector del champiñón. Este programa contempla la recogida de material de rechazo generado en su cultivo para elaborar pallets reutilizables en el sector.
Este proyecto, denominado Mush-wood, cuenta con el apoyo del Gobierno de la Rioja, de la Unión Europea y del Gobierno de España. El objetivo es generar acciones de recuperación de plásticos desechables en La Rioja.
Mush-wood tiene como objeto resolver los problemas de gestión de residuos plásticos agrícolas generados en el cultivo de hongos, a la vez que proporcionará nuevos materiales reciclados para su utilización en el sector agroalimentario.
La recogida del residuo plástico de los productores de champiñón se centraliza en las instalaciones de reciclaje de hongos ubicadas en Pradejón (La Rioja), gestionadas por Sustratos de La Rioja, donde es prensado y acumulado.
Para José Vicente Sainz, CEO de Solteco, «se puede dar un segundo uso a los plásticos no reciclables de la producción del champiñón para volver a aprovecharlos. Recuperaremos así residuos plásticos para producir un material sostenible y reciclado».
Sainz añade que «tenemos acuerdos con Autol, Ausejo y Pradejón para la revalorización de sus residuos de plásticos en el cultivo de hongos, mediante un modelo de economía circular».
El programa se lleva a cabo a través del fondo europeo agrícola de desarrollo rural, con inversión europea en las zonas rurales. El consorcio que lo lleva a efecto está formado por el Centro Tecnológico del Champiñón (CTICH), la Asociación de productores de champiñón (Asochamp), Solteco como gestor transformador del residuo plástico y GAP como socio tecnológico.
Por otra parte, Solteco continúa desarrollando el proyecto europeo ÑCostas, concedido por el CDTI. El objetivo es recuperar los plásticos del Mar Mediterráneo para poder darles un segundo uso en bateas en Galicia.