El Consejo de Administración de Sogama ha acordado la aprobación del pliego de condiciones que regirá la construcción y puesta en marcha de una planta de compostaje para el tratamiento de la fracción orgánica contenida en los residuos urbanos y que se ubicará en el vertedero de Areosa (Cerceda).
Esta actuación forma parte del proceso de ampliación de las instalaciones que conforman la infraestructura industrial de la empresa pública y que le permitirá gestionar y tratar de forma óptima toda la basura recibida, incrementando su reciclado y destinando a vertido, única y exclusivamente, aquella fracción de desechos que no se pueda reciclar ni valorizar material o energéticamente. De hecho, la previsión es reducir en un 30 por ciento los residuos depositados en Areosa.
Con un importe máximo estimado en 3.940.000 euros (+ IVA) y una capacidad anual de tratamiento para 15.000 toneladas, el plazo de ejecución previsto para las obras correspondientes a esta planta será de aproximadamente 8 meses y medio (34 semanas), período tras el cual se prevé realizar las pruebas de capacidad y rendimiento, que tendrán una duración aproximada de unos 2 meses (en torno a 9 semanas).
En todo caso, se estima que la instalación esté ejecutada y en funcionamiento hacia finales del 2017
OTRAS APROBACIONES:
AMPLIACIÓN Y MEJORA DE LAS DEPURADORAS DEL COMPLEJO INDUSTRIAL
Asimismo, el Consejo dio su visto bueno a la adjudicación del contrato correspondiente a los trabajos de ampliación y mejora de las depuradoras con las que cuenta el complejo medioambiental de Cerceda, incluyendo la operación y mantenimiento de las mismas, así como el mantenimiento integral de la red de vigilancia de la calidad del aire de la planta termoeléctrica.
En el primer caso, el servicio incluye la operación y mantenimiento, tanto preventivo como correctivo, de las dos plantas depuradoras (una físico-química y otra biológica) con las que cuenta el complejo cercedense y cuya función es procesar todos los efluentes derivados del normal funcionamiento de las distintas plantas integradas en esta infraestructura, incluyendo igualmente los trabajos de ampliación y mejora de ambos dispositivos.
Como no podía ser de otra forma, el adjudicatario tendrá en cuenta todos los aspectos necesarios para cumplir con los requisitos contemplados en la Autorización Ambiental Integrada (AAI) y sus posteriores modificaciones, así como toda la normativa legal aplicable. El comienzo de las obras está previsto para el segundo trimestre del año en curso.
Con un presupuesto máximo de 2.655.480 euros (+ IVA) euros y un plazo de ejecución de 3 años, con una prórroga excepcional, un total de 14 firmas, la mitad en UTE, concurrieron a esta licitación, resultando adjudicatario del servicio, por un importe de 1.971.550,72 euros (+ IVA), la empresa Sistemas Técnicos y Montajes, S.L.
MANTENIMIENTO DE LA RED DE VIGILANCIA DE LA CALIDAD DEL AIRE
Respecto al concurso correspondiente al mantenimiento, integral y continuo, de la red de vigilancia de la calidad del aire en la planta termoeléctrica, donde se lleva a cabo la valorización energética de la parte no reciclable de los residuos, convirtiéndola en electricidad, la adjudicación del servicio, valorado en 300.000 euros (+ IVA) recayó en la firma Applus Norcontrol S.L.U, por un importe de 224.000 euros (+ IVA).
El contrato, que se realizará por un período de tres años, podrá ser prorrogado de forma expresa hasta un máximo de cuatro, consistiendo los trabajos a desarrollar en la recepción y archivo, en tiempo real, de los datos recopilados a través de la red de vigilancia, que se encuentra conformada por cuatro estaciones de inmisión, una meteorológica y un centro de control conectado a dos equipos instalados en el laboratorio químico del complejo y en el hall de oficinas de Sogama, permitiendo así que la información pueda ser consultada en cualquier momento por los ciudadanos.
Los datos obtenidos han venido corroborando de forma permanente las bajas emisiones procedentes de la actividad industrial de Sogama, situándose todos los parámetros muy por debajo de los límites legales, habida cuenta de que en las instalaciones de valorización energética son mucho más restrictivos que los que rigen para cualquier otra infraestructura industrial. De hecho, este tipo de plantas son las más vigiladas en sus aspectos medioambientales, pesando sobre las mismas una rigurosa y exhaustiva normativa.