En las sesiones de trabajo se ha profundizado, entre otras cuestiones, en la digitalización del sector, las mejoras en la eficiencia energética de las plantas de valorización energética y en la optimización de la gestión de aguas.
La empresa pública gallega de gestión de residuos Sogama ha acogido, en su sede de Cerceda (A Coruña) y durante dos días (5 y 6 de octubre), una jornada técnica centrada en el mantenimiento y operación de plantas de valorización energética de residuos. En la misma se han dado cita miembros de los departamentos técnicos de distintas plantas adscritas a Aeversu (Asociación Española de Empresas de Valorización Energética de Residuos Urbanos). Es el caso de Trargisa (Girona), UTE TEM (Mataró) y Sirusa (Tarragona), Tirme (Mallorca), Zabalgarbi (Bilbao), Remesa (Melilla), TirCantabria (Cantabria) y CTRASA (Andorra).
Aunque con diferencias tecnológicas, la labor común de estas instalaciones es la recuperación energética de la parte no reciclable contenida en los residuos, conforme a la jerarquía de gestión estipulada por la Unión Europea y que sitúa la valorización energética después del reciclaje, pero antes del vertedero, representando este último la peor opción debido a su negativo impacto sobre el entorno y la salud.
No en vano, los vertederos emiten 19 veces más CO2 que las plantas de valorización energética, con la particularidad de que en estos se entierra y desaprovecha la energía contenida en los desechos no reciclables, cuando podría ponerse en valor mediante su transformación en electricidad y calor, productos de interés estratégico y mucho más en el actual escenario de crisis energética. De hecho, la energía producida en Sogama equivale al consumo del 12% de los hogares gallegos.
Actualmente, y según datos de Aeversu, el conjunto de plantas de valorización energética de residuos adscritas a esta asociación (12 en total) tratan, de media, unas 2.300.000 t/año de residuos no reciclables y producen en torno a 1.600.000 MWh de energía.
Por su parte, FEAD (Federación Europea de Gestión de Residuos) asegura que, a día de hoy, las plantas europeas WtE pueden suministrar electricidad a 18 millones de habitantes y calor a 15,2 millones.
TEMÁTICAS ABORDADAS
En las sesiones de trabajo desarrolladas en Sogama se ha profundizado, entre otras cuestiones, en la digitalización del sector, las mejoras en la eficiencia energética de las plantas de valorización energética y en la optimización de la gestión de aguas. Asimismo, los participantes han intercambiado experiencias sobre la gestión que han seguido en sus instalaciones ante la escasez de materiales y el incremento del precio de los mismos, especialmente en el caso de aquéllos calificados como “críticos”.
El presidente de Sogama, Javier Domínguez, mantuvo un breve encuentro con los técnicos de diferentes puntos de la península, a los que animó a enriquecer la importante labor que llevan a cabo, pues “su esfuerzo y trabajo contribuirán a la excelencia de unas instalaciones punteras que logran convertir, con todas las garantías ambientales y de protección de la salud, los residuos que ya no se pueden reciclar en nuevos recursos de alto valor que, además, son prioritarios en las sociedades modernas”.