La investigadora Jéssica Serrano Díaz, de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), ha realizado un trabajo cuyo objeto ha sido la valorización de los biorresiduos florales que se obtienen en la producción de azafrán en especia para contribuir a la generación de nuevos productos alimentarios a partir de las flores del azafrán (Crocus sativus).