Científicos japoneses han desarrollado una tecnología de fotosíntesis artificial que produce precursores de nailon biodegradable a partir de compuestos derivados de biomasa y amoníaco.
Un proceso de fotosíntesis artificial transforma el dióxido de carbono en combustibles líquidos
[themoneytizer id=»17425-1″] Investigadores de la Universidad de Illinois han producido hidrocarburos complejos y licuables a partir de CO2 y otros recursos naturales, como la luz solar.