Investigadores de la Universidad de Bath han desarrollado un proceso de reciclaje químico suave y rápido para los policarbonatos, y que se podría aplicar a otros tipos de plásticos.
Científicos británicos obtienen bioplásticos a partir de azúcar y dióxido de carbono
Además de ser biodegradables, estos nuevos plásticos libres de bisfenol A son biocompatibles, lo que permitiría su uso en aplicaciones médicas como los implantes o el cultivo de órganos.