Organizada por la FER (Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje), la decimoséptima edición del congreso se ha celebrado en Bayona, Pontevedra, los pasados 13 y 14 de junio.
El Congreso Nacional de la Recuperación y el Reciclado es un punto de encuentro de gran importancia que cobra especial relevancia por la problemática del reciclado del plástico. Allí se han reunido tanto las empresas especializadas en la recuperación y el reciclaje como los profesionales relacionados con el sector. Si bien es cierto que la FER está conformada en su mayoría por empresas dedicadas al metal, no hay que olvidar que el plástico está presente en mayor o menor medida en los materiales que dichas empresas recuperan y valorizan posteriormente.
TOMRA Sorting Recycling, empresa que apuesta por la inversión en I+D y el desarrollo de tecnologías que se adaptan a las necesidades del momento, estuvo presente en esta cita en la que el objetivo fundamental es aportar y compartir soluciones avanzadas que permitan a las empresas españolas estar a la altura de los requisitos actuales en esta materia.
Por este motivo, la incorporación el pasado mes de febrero de Eduardo Morán, que ostenta el cargo de Área Sales Manager con especial dedicación al mercado de la recuperación de metales en España y Portugal, supone un valor añadido en la consecución de estos logros. Morán cuenta con un amplio recorrido como responsable de la gestión de materia prima en fundiciones de acero (Harsco Metals & Minerals y Megasa) y como técnico comercial a nivel internacional (Metalogenia).
Desde su dilatada experiencia, aclara que “muchas de las empresas dedicadas a la recuperación del metal están empezando a valorar la posibilidad de dar un paso adelante a nivel de maquinaria y tecnología para separar y valorizar los distintos tipos de metales presentes. Así, podrán alinearse con los requerimientos europeos a nivel de estrategia y normativa además de obtener, obviamente, un rendimiento económico de dicha selección o separación”.
Soluciones basadas en sensores para la separación de metal
TOMRA Sorting Recycling presentó a los asistentes al Congreso tres soluciones de alta gama para la separación de metal que tienen como denominador común ser tecnologías punteras en lograr la máxima recuperación de este material. Están dirigidas a empresas fragmentadoras de VFU (Vehículos Fuera de Uso), empresas de gran especialización en términos de recuperación-valorización dentro del sector del metal, empresas especializadas en el granallado de metales, fundiciones de diferentes metales (cobre, aluminio, aleaciones de aluminio) y empresas de tratamiento de RAEE (Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos).
El sistema COMBISENSE está especializado en fracciones de metal de gran pureza (cobre, aluminio, latón, placas de circuito impresos, cables eléctricos, etc.) incluyendo las más difíciles a nivel de composición, granulometría y mezcla de flujos de residuos y metal mezclados. Se utiliza principalmente para los siguientes materiales: Residuos VFU; RAEE; y Zorba (mezcla de metales grises, cobre y latón).
Por su parte, la COMBISENSE CHUTE destaca por su flexibilidad a la hora de identificar parámetros y diferencias en una mezcla de material de reducida granulometría. Su aplicación principal es la separación de metales granulados (tipo granallas o hilo de cobre triturado) tales como cobre (metal rojo), latón (metal amarillo) y mezcla de metales grises (aluminio, zinc, magnesio, plomo y hierro, entre otros).
“Además de la separación premium por color, brillo y forma de cualquier material, el éxito de ambos equipos radica en su capacidad de discernir metales pesados como cobre (rojo), latón (amarillo) y grises (mezcla de diferentes metales grises como zinc, plomo, magnesio y hierro) o incluso magnesio de aluminio. Entre otras aplicaciones, cuentan también con la de la separación de fracciones de cable de cobre y de PCI (placas de circuito impreso)”, afirma Morán.
Por último, TOMRA Sorting Recycling presentó un tercer equipo: el X-TRACT, uno de los más demandados en el mercado. Cuenta con múltiples ventajas para la separación de aluminio, sus aleaciones, metales pesados y plásticos aditivados con retardantes a la llama en base bromo o cloro. Su tecnología está basada en rayos X de transmisión (tecnología XRT) de alta resolución que, junto al Análisis Multicanal de la Densidad, mejora la precisión de la clasificación. Además, optimiza el rendimiento y asegura una calidad óptima. El X-TRACT está equipado ahora con la nueva y galardonada interfaz de usuario TOMRA ACT, muy intuitiva para los operarios y capaz de brindar información crítica en tiempo real sobre la clasificación.
La “National Sword” y la necesidad de actualización tecnológica
Desde la entrada en vigor de la “National Sword” (Espada Nacional) en China en 2018, las empresas se vieron abocadas a actualizar su equipamiento para poder valorizar la mayor cantidad de material posible sin menoscabo de una excelente calidad y pureza “obteniendo así unos productos finales que son precisamente los que el mercado está demandando cada vez con más fuerza”, puntualiza Morán.
La “National Sword” ha supuesto en este sentido un empujón muy importante en el sector del metal hacia una mayor especialización, ya que una gran cantidad de revueltos y materiales que no se reciclaban en Europa, y se enviaban a China para su posterior valorización, hoy deben ser tratados en sus puntos de origen. Este hecho conlleva un desafío y una vuelta de tuerca más para este sector. Las nuevas tecnologías de separación por sensores son hoy un elemento clave para afrontar dicho desafío. Resulta, por tanto, crítica la capacidad de dichas empresas para actualizarse y convertir esta dificultad en una excelente oportunidad de negocio”, explica.
“En TOMRA Sorting Recycling somos conscientes de este reto. Por eso, nuestros equipos y tecnología están diseñados para cumplir con los retos planteados por los requerimientos legales. El futuro pasa, sin duda, por una mayor especialización de las empresas para dar más y mejores soluciones de recuperación a la inmensa mayoría de los materiales que llegan a sus plantas de recuperación y tratamiento”, concluye Morán.