Una nueva tecnología permite recuperar el yeso de los residuos de construcción

La viabilidad técnica de este innovador sistema avanzado, que ha sido desarrollado en el País Vasco a través del proyecto IRCOW, ya se ha demostrado mediante su implementación en una planta de tratamiento de RCD.

El proyecto IRCOW, liderado por Tecnalia-Construcción y financiado por la Comisión Europea, ha desarrollado un sistema avanzado de tratamiento de residuos de construcción y demolición (RCD), capaz de detectar partículas de una determinada naturaleza, como el yeso, y separarlas del resto de material.

Las investigaciones ya han demostraqdo la viabilidad técnica del reciclado del yeso en la planta de tratamiento de RCD BTB Bizkaiko Txintxor Berziklategia, situada en la localidad vizcaína de Ortuella, que ya utiliza esta tecnología innovadora.

Las plantas de tratamiento de RCD reciben escombro procedente de obras de reforma o demoliciones, y lo transforman en un nuevo producto: el árido reciclado, un material granular pétreo, similar al procedente de canteras, apto para rellenos varios, carreteras e incluso hormigones.

Pero las trazas de yeso remanentes en estos áridos perjudican su calidad, por lo que es preciso separarlas del árido, constituyendo un residuo de producción de las plantas.

El yeso es un material utilizado desde tiempos ancestrales y aún en plena vigencia con una característica muy particular, se puede reciclar una y otra vez para fabricar nuevos productos sin reducir sus prestaciones. En Europa se instalan anualmente más de 1.600 millones de metros cuadrados de placa de yeso en interiores.

El problema ambiental reside en la mezcla del yeso con otros materiales. La tecnología de separación instalada en la planta BTB, desarrollada por TOMRA Sorting Gmbh (participante en el proyecto IRCOW), basa su eficacia en la detección de la presencia de yeso mediante infrarrojos.

Debido al variado origen del yeso (elementos prefabricados, enlucidos, cielos rasos de escayola…), la muestra separada en BTB contiene desde partículas de yeso aparentemente puro, hasta partículas en las que aparece pegado a otro material, como ladrillo u hormigón, con pinturas o con fibras de varias naturalezas. A pesar de la presencia de materiales distintos al yeso, se ha podido comprobar que la pureza de esta muestra (en términos de contenido total en fases de sulfato de calcio y agua) es superior al 80%.

La técnica aplicada se basa en el mismo proceso que aplican los fabricantes de productos de yeso: deshidratación –para reconvertir el yeso endurecido o sulfato cálcico dihidratado en conglomerante a base de yeso, sulfato cálcico hemihidratado– y molienda, obteniendo un polvo fino que, al ser mezclado con agua, sea moldeable durante un cierto tiempo, previo a su endurecimiento en la misma forma química inicial (sulfato cálcico dihidratado).

Los investigadores han trabajado en formulaciones con sustituciones parciales y totales de yeso comercial por yeso reciclado, y han constatado la viabilidad técnica del reciclado del yeso de RCD, que actualmente se elimina en vertedero.

Este yeso reciclado podría reintroducirse en el proceso de fabricación de nuevos productos de yeso, cerrando el ciclo de vida de este material. Todo ello, además, gracias a una tecnología de separación avanzada que mejora la calidad de los áridos reciclados.

Fuente:
Ihobe