El material utilizado en la fabricación de este mobiliario campestre procede de los plásticos del cultivo de la chufa y de la paja de los cultivos de arroz de la Albufera.
La concejalía de Devesa-Albufera del Ayuntamiento de Valencia ha comprado e instalado un total de 24 mesas de picnic hechas a partir de los plásticos del cultivo de la chufa de Valencia y de la paja del arroz del Parque Natural de la Albufera, evitando así su quema. Este nuevo mobiliario sustituye el anterior, de madera y hierro, que estaba muy desgastado por el paso del tiempo.
Según la información proporcionada por la empresa fabricante, radicada en Alginet, el material utilizado en estos merenderos del bosque de la Devesa ha llegado a los 8.082,50 kg de plástico posconsumo, mezcla de polipropileno y polietileno. El polietileno procede de los plásticos del cultivo de la chufa de la DO «Chufa de València» de la campaña 2017. Por otro lado se han usado 1.616,50 kg de paja de arroz del Parque Natural de la Albufera.
Mediante el uso a la paja del arroz para este mobiliario se evitan «los gases de efecto invernadero que produciría su quema», ha declarado el concejal de Gobierno Interior y Devesa-Albufera, Sergi Campillo. «Y además también damos salida al plástico de uso agrícola de otro de nuestros cultivos más característicos: la chufa de València, con la que después se hace la horchata, de forma que evitamos que acabe en un vertedero”.
En ese sentido, hay que destacar que se han dejado de emitir a la atmósfera 3.907,84 kg de CO2 equivalente y se han dejado de talar 83 árboles (16,44 m3 de madera), si este mobiliario hubiera sido de madera. El importe de la intervención ha sido de 21.598,22 euros.
ECONOMÍA CIRCULAR Y SOSTENIBLE
“Esta actuación supone cerrar un ciclo natural y energético, ya que se recoge el plástico que se genera muy cerca de la ciudad de Valencia en el cultivo de la chufa, y también la paja del arroz procedente de los cultivos del Parque Natural de la Albufera, evitando así residuos contaminantes y recuperándolos para mobiliario utilizado precisamente en la misma Devesa de la Albufera”, ha dicho Campillo, que ha añadido que “aprovechamos residuos que están destinados a ser quemados como la paja del arroz o a ser tratados en vertederos para generar un nuevo producto que pone en valor uno de nuestros espacios naturales más preciados, la Devesa. Y además, lo hacemos con residuos que se producen muy cerca. Es un magnífico ejemplo de economía circular y sostenible”.