Según las categorías estipuladas por la DGT, los automóviles eléctricos de pila de combustible forman parte del grupo menos perjudicial para el medio ambiente.
Los automóviles de hidrógeno, que basan su funcionamiento en la producción de electricidad a través de una pila de combustible, se integran dentro de la categoría de automóviles más respetuosos con el medio ambiente, según la clasificación por niveles del parque automovilístico español realizada por la DGT.
Así, los vehículos de hidrógeno cuentan con el distintivo “cero emisiones”, el primer grado de un total de cuatro que han sido definidos en función del porcentaje de emisiones de partículas a la atmósfera. Este nivel está compuesto por automóviles que no emiten CO2 a la atmósfera y no resultan perniciosos para la contaminación del aire, frente a los tradicionales modelos de gasoil y gasolina, que se engloban dentro de las categorías ECO (híbridos), C y B, y resultan más contaminantes.
De este modo, los coches impulsados por este sistema podrán beneficiarse de las ventajas que algunos planes para la reducción de la contaminación conceden a los medios de transporte del nivel cero emisiones. Tal es el caso del Ayuntamiento de Madrid, que tras presentar recientemente su Plan de Calidad del Aire y Cambio Climático, favorecerá la integración de las tecnologías limpias y el transporte sostenible en la ciudad. De esta manera, llevará a cabo reducciones en el impuesto de circulación y el acceso libre en el Área Central Cero Emisiones para este tipo de automóviles, además de la gratuidad del aparcamiento en las zonas reguladas vigentes.
Igualmente, y dentro de las facilidades concedidas por este Plan, los vehículos de hidrógeno que cuenten con el distintivo ambiental de cero emisiones podrán también circular y aparcar en el interior de la M-30 sin restricciones e incluso transitar sin las limitaciones que las tecnologías tradicionales tendrán que asumir a partir de 2025.
En la actualidad, España cuenta con seis “hidrogeneras” (estaciones de repostaje de hidrógeno) situadas en: Albacete, Huesca, Zaragoza, Puertollano y dos en Sevilla. El Marco de Acción Nacional de Energías Alternativas en el Transporte prevé llegar a veinte estaciones en 2020 para facilitar la expansión de vehículos con esta tecnología.
“Creemos que la adopción de este tipo de planes puede suponer el punto de partida para el inicio de una nueva etapa en la que las energías limpias irrumpan en nuestras carreteras. El futuro del transporte pasa por conseguir ciudades libres de contaminación, y por ello, es importante ir concienciando a las personas en pro de tecnologías que respeten el medioambiente”, ha señalado Javier Brey, presidente de la Asociación Española del Hidrógeno (AeH2).
“Desde la Asociación Española del Hidrógeno, estamos abiertos a colaborar con los organismos y entidades públicas con el objetivo de promover la investigación y adopción del uso del hidrógeno como combustible como alternativa a las energías tradicionales en los medios de transporte”, ha añadido.