Liderado por Ternua Group, en una primera fase se han reciclado dos toneladas de sábanas con las que se ha producido nuevo hilo para fabricar sudaderas y camisetas que saldrán a la venta este mismo mes.
El proyecto Wearcycle, impulsado por la empresa textil Ternua Group, ha conseguido valorizar residuos textiles de lavanderías industriales para producir nuevas prendas de calidad. En concreto, a través de este proyecto se han reciclado dos toneladas de tejidos estropeados, concretamente sábanas de algodón de hotel, con los que se ha creado un hilo utilizado para fabricar camisetas y sudaderas. En total, se ha creado una línea de 18 prendas que estarán en el mercado a partir de este mes de febrero.
El proceso comienza con la recogida de los residuos textiles en una lavandería de la empresa Gureak en Oiartzun (Gipuzkoa). Posteriormente, la empresa alicantina Belda y Lloréns ha producido con ellos un hilo 50% algodón reciclado y 50% algodón orgánico. Este hilo, muy resistente y completamente sostenible, es el que ha utilizado Ternua para producir sus nuevas prendas.
El proyecto tiene también el valor añadido de crear oportunidades de empleo para personas con dificultades de inserción laboral, incidiendo en la dimensión social de la economía circular y los nuevos modelos de economía que nos trae la transición ecológica.
El proyecto Wearcycle es, por tanto, un ejemplo de colaboración entre diferentes agentes que resuelve un importante problema de residuo textil posconsumo ya que se centra en la recogida de productos que hayan llegado al final de su ciclo de vida y su posterior reciclaje, evitando su depósito en vertederos.
Edu Uribesalgo, director de Innovación de Ternua, ha afirmado que este proyecto “es un gran ejemplo de economía circular que tiene grandes ventajas ambientales. Por un lado, evitamos su vertido, y, por otro, al extender el ciclo de vida de los textiles usados, podemos disminuir la emisión de dióxido de carbono y la necesidad de producir nuevos tejidos, pasando de una producción lineal a una circular. Ahora, una sábana de hotel puede convertirse en una camiseta o una sudadera. En un mercado donde los consumidores son cada vez más conscientes, esto es un cambio de juego”.
El Departamento de Medio Ambiente de la Diputación Foral de Gipuzkoa también ha colaborado en este proyecto, que propone un cambio en el modelo productivo y supone un impulso para la economía local. Jose Ignacio Asensio, diputado de Medio Ambiente ha declarado que “esto es un claro ejemplo de por qué en Gipuzkoa estamos en la vanguardia de la industria textil sostenible: evitamos la generación de residuo, promovemos la reutilización de materiales y fomentamos un nuevo modelo producción que sirve de impulso y crecimiento de la economía local”.
Francisco Mataix, director ejecutivo de Belda y Lloréns, ha afirmado que este proyecto: “muestra que es posible dar una segunda vida a los residuos textiles, crear un hilo de calidad, en nuestro caso lleva el nombre de Ecolife, sin tener que crear nuevas materias primas para elaborar prendas”
Debido a los modelos de consumo promovidos por el fast fashion, el aumento del consumo de ropa ha sido exponencial en los últimos años. El diputado foral ha recordado que la gestión de los residuos textiles es una de los principales focos de sostenibilidad en la industria de la moda: “Sabemos que el impacto ambiental y social de la industria textil es muy elevado, y tal y como recogen las últimas legislaciones, es imperativo tomar medidas para tratar de reducirlo, tanto en lo que se refiere a la recogida selectiva, a la preparación para su reutilización y al reciclaje de los residuos textiles”.